La caja de luz suele ser el primer punto de contacto entre una marca y su público en un espacio físico. Llama la atención por su iluminación, su forma y su mensaje. Actúa sobre los sentidos incluso antes de que la persona interactúe con el stand o la exposición. Es justo en esos pocos segundos cuando se decide si tu mensaje será visto y recordado. Por eso, el diseño gráfico de la caja debe ser legible, bien pensado y adaptado al entorno. En lugar de recargar el diseño, es mejor apostar por la simplicidad y una jerarquía visual clara. En este artículo encontrarás seis consejos para crear un arte que realmente funcione.
Comprar un roll‑up puede parecer una decisión sencilla: al fin y al cabo, se trata de un banner que se despliega y se coloca... pero no todos los roll‑ups son tan simples. Ya llegaremos a eso. Cuando llega el momento de elegir un modelo concreto, descubrimos que hay más opciones de las que imaginábamos. Se diferencian en diseño, materiales y forma de montaje, pero todos comparten lo mismo: su propósito.
En este artículo, te mostraré los distintos tipos de roll‑ups y te explicaré cuándo vale la pena optar por una solución clásica y cuándo es mejor invertir en una alternativa más moderna.
Los roll-ups tienen un grupo fiel de seguidores. Aparecen por todas partes: en conferencias, centros comerciales o recepciones. Llevan años cumpliendo su función. Pero ¿y si se pudiera hacer mejor? Sin revolución, pero con ingenio. Si te preguntas si vale la pena seguir invirtiendo en roll-ups para tu próximo evento, estás en el lugar adecuado. Esta guía te ayudará a tomar distancia y descubrir opciones que pueden llevar tu promoción al siguiente nivel.
Cualquiera que haya participado alguna vez en una feria sabe algo con certeza: incluso la mejor idea puede pasar desapercibida si no se presenta de forma adecuada. Muchos productos se parecen entre sí, y el público está saturado de propuestas repetitivas y producción en serie. Lo que importa no es solo la oferta, sino cómo la presentas.
Los visitantes buscan objetos diferentes, con personalidad, funcionales, y sobre todo, auténticos. Las ferias no son solo espacios de venta: son espacios de experiencia. El ambiente que crees alrededor de tu stand de feria puede marcar la diferencia entre atraer miradas… o pasar inadvertido.
En este artículo compartimos estrategias prácticas para diseñar un stand de feria que destaque no solo por su producto, sino por el ambiente y la presentación.
Promocionar una región dentro de una feria de turismo no es tarea fácil. Cada visitante recorre los pasillos esperando sorprenderse. Buscan emociones, ideas y beneficios concretos. Quieren sentir que empiezan un viaje. Los turistas buscan inspiración; los inversores, oportunidades. Y los medios, una buena imagen y una historia clara. ¿Cómo lograr que tu stand sea el punto de partida de todo eso? Aquí te lo contamos.
El combo de roll-up y mostrador es un clásico para cualquiera que haya montado un stand en una feria: rápido de instalar, práctico y seguro. Pero si estás leyendo este artículo, es probable que te estés preguntando si eso es todo lo que puedes ofrecer. Tal vez tu stand se pierde entre los demás. Tal vez la competencia llama más la atención. Aquí te contamos cuándo conviene dar un paso más – y cómo ese paso puede transformar tu presencia en los eventos.
El cerebro humano solo necesita unos segundos para evaluar lo que ve. En ese instante decide si algo llama la atención, genera confianza o merece una pausa. En el mundo del marketing, eso significa: no tienes una segunda oportunidad para causar una primera impresión.
Por eso es tan importante cómo presentas tu marca en espacios públicos: ferias, congresos o puntos de venta. La elección entre un roll-up y un photocall personalizado no es solo estética o económica. Es una decisión estratégica sobre cómo quieres que te recuerden: como una marca ágil y dinámica, o como una presencia profesional, sólida y dominante.
Las personas compran con los ojos. Antes de leer un eslogan o escuchar una presentación, algo tiene que captar su atención. Ese primer instante decide si se acercarán a tu stand o si pasarán de largo. Y tú solo tienes unos segundos para impactar.
Por eso el roll-up es ese especialista silencioso en causar una buena primera impresión. No necesita hablar mucho: comunica con su imagen. Siempre está en el lugar adecuado, listo para contar la historia de tu marca por ti. No es un clásico por casualidad: lo es porque funciona. Y lo hace rápido, de forma eficaz y sin complicaciones.
El roll-up es el rey indiscutible de los espacios interiores. Quien haya montado alguna vez un stand en una feria lo conoce bien. Se monta en un instante, ocupa poco espacio y la gráfica llama la atención. ¿Se puede pedir más? Pues sí. ¿Y si el evento se celebra al aire libre? ¿Un picnic corporativo, un festival, una promoción frente a una tienda? ¿Aguantará el roll-up o saldrá volando con el viento?
Al encargar una estructura publicitaria, probablemente te encuentres con dos términos: impresión por sublimación e impresión con tinta solvente. Para quienes no pertenecen al sector, puede sonar a jerga técnica, pero las diferencias entre estos métodos realmente importan: influyen en la apariencia del gráfico, su durabilidad y el tipo de material sobre el que se puede imprimir.
Antes de entrar en comparaciones, empecemos por lo básico: ¿Qué significan exactamente estos nombres?
La mayoría piensa que un photocall publicitario es solo un fondo para ferias. Gráfica, estructura, montaje rápido... y listo. Pero en realidad, un photocall puede hacer mucho más. En esta guía te mostraremos paso a paso cómo elegir el modelo adecuado y cómo sacarle el máximo partido, tanto si es tu primer evento como si llevas diez campañas en ruta. Descubre cómo un photocall bien elegido puede ayudarte a destacar y a tomar el control de tu imagen offline.
A primera vista, un expositor textil puede parecer solo un soporte con gráfica, algo que se coloca detrás de un ponente o en un stand. Pero quienes lo han utilizado saben que es mucho más que un simple fondo. Es una herramienta versátil, adaptable a diferentes eventos, espacios y objetivos. Puede convertirse en escenografía, punto de información, soporte luminoso o incluso una recepción móvil. En este artículo te mostramos por qué merece la pena tener uno siempre a mano y todo lo que puede ofrecer.